*** El coste y el futuro de los combustibles***
mayo 25, 2023 at 8:23 ,
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Los combustibles fósiles, como la gasolina y el diésel, son la principal fuente de energía para el transporte y la industria en el mundo. Sin embargo, su uso tiene un alto impacto ambiental, social y económico, que se ha agravado por el aumento de la demanda y la escasez de la oferta.
En este artículo, vamos a analizar cómo ha evolucionado el precio de los combustibles en los últimos años, qué factores lo determinan y qué alternativas existen para reducir la dependencia de los hidrocarburos.
## ¿Cómo ha oscilado el precio del diésel y la gasolina?
El precio de los combustibles es muy variable y depende de múltiples factores, como el coste de la materia prima (el petróleo), los impuestos, los márgenes de distribución y comercialización, la competencia entre las empresas, la oferta y la demanda o las fluctuaciones del tipo de cambio.
Según los datos del RACE (Real Automóvil Club de España), el precio medio de la gasolina en España ha pasado de 1,31 euros por litro en enero de 2020 a 1,63 euros por litro en enero de 2023, lo que supone un incremento del 24 por ciento. En el mismo periodo, el precio medio del diésel ha subido de 1,24 euros por litro a 1,68 euros por litro, un 35 por ciento más².
Estos precios están muy por encima de la media europea, que según los datos de la Comisión Europea se sitúa en 1,53 euros por litro para la gasolina y 1,48 euros por litro para el diésel. Esto se debe principalmente a los impuestos que se aplican en España, que representan alrededor del 50 por ciento del precio final².
## ¿Qué factores influyen en el precio del combustible?
El principal factor que determina el precio del combustible es el coste del petróleo, que es una materia prima no renovable y sujeta a la volatilidad del mercado internacional. El petróleo se cotiza en dólares estadounidenses, por lo que las variaciones del tipo de cambio también afectan al precio final.
El precio del petróleo depende de la oferta y la demanda global, que a su vez están condicionadas por factores geopolíticos, económicos y climáticos. Por ejemplo, las tensiones en Oriente Medio, los conflictos armados, las sanciones comerciales, las crisis sanitarias o las catástrofes naturales pueden alterar la producción o el transporte del crudo y provocar subidas o bajadas bruscas.
Otro factor que influye en el precio del combustible es el nivel de impuestos que se aplican en cada país. Los impuestos que se pagan son el IVA, el Impuesto Especial de Hidrocarburos y el Impuesto de Ventas Minoristas. El objetivo de estos impuestos es recaudar fondos para el Estado y desincentivar el consumo de combustibles fósiles por sus efectos contaminantes².
El precio final del combustible se completa con los costes fijos de logística y distribución, que suponen un 12 por ciento del coste total y un 2 por ciento del margen bruto que se queda el mayorista².
## ¿Qué alternativas existen para reducir la dependencia de los combustibles fósiles?
Ante el escenario de aumento del precio de los combustibles fósiles y sus consecuencias negativas para el medio ambiente y la sociedad, se plantean diversas alternativas para reducir la dependencia de los hidrocarburos y avanzar hacia una movilidad más sostenible.
Una de las alternativas es el uso de combustibles sintéticos o e-fuels, que son líquidos o gases producidos a partir de fuentes renovables como el agua, el aire o la biomasa. Estos combustibles tienen la ventaja de ser compatibles con los motores actuales y reducir las emisiones de CO2. Sin embargo, su proceso de producción es muy complejo y consume mucha energía, lo que hace que su coste sea muy elevado⁴.
Otra alternativa es el uso de vehículos eléctricos o híbridos enchufables, que funcionan con baterías recargables mediante una conexión a la red eléctrica. Estos vehículos tienen la ventaja de ser más eficientes, silenciosos y limpios que los convencionales. Sin embargo, su precio es todavía elevado y requieren una infraestructura adecuada para su recarga.
Finalmente, otra alternativa es el uso de medios de transporte colectivos o compartidos, como el autobús, el tren o el metro. Estos medios tienen la ventaja de reducir el tráfico, el consumo energético y las emisiones contaminantes. Sin embargo, requieren una planificación urbana y una inversión pública que garanticen su accesibilidad y calidad.
## Conclusión
El coste y el futuro de los combustibles fósiles son temas clave para el desarrollo económico y social del mundo. El aumento del precio del combustible afecta al bolsillo de los consumidores y a la competitividad de las empresas. Además, tiene un impacto negativo sobre el medio ambiente y la salud pública.
Por ello, es necesario buscar alternativas más sostenibles que permitan reducir la dependencia de los hidrocarburos y favorecer una transición energética hacia fuentes renovables. Esto supone un reto tecnológico, político y social que requiere una visión global y una acción coordinada entre todos los agentes implicados.
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